La mamada de Isis fue mágica

No vamos a hablar de degeneraciones sexuales, sí de ese toque de perversión que podemos sacar en nuestros actos más íntimos toda vez que marquemos unos límites. Ciertas prácticas se han transformado en fenómeno viral, frecuentemente más por la carcajada que provocan que como hazaña sexual.

Es una resolución, elección y juicio

Quica apunta el pene que descansa sobresaliendo aún por las aberturas de sus ropas. Los 2 rompen a reír, con carcajadas eximentes de toda sofocación, sin remordimientos. Y a Enrique le da la sensación de que es el instante clave para saldar asimismo todas y cada una de las cuentas pendientes.

Transfórmese en su marca

Cuando estamos vacíos de ego, nosotros también podemos admitir tranquilamente los acontecimientos variables de la vida. Cuando dejamos de hacer distinciones llenas de prejuicios (manso o áspero, bonito o bien feo, bueno o bien malo) una quietud pacífica permeará nuestra mente